La icónica actriz y cantante murió este domingo a los 76 años. Se hizo famosa en los sesenta al protagonizar películas como «Blow-up» y «La piscina», pero la popularidad le llegó luego de su grabación de «Je t’aime, moi non plus» con Serge Gainsbourg, con quien mantuvo un apasionado romance.
NA – La cantante y actriz franco-británica Jane Birkin murió en su casa de París a los 76 años, según la información obtenida por AFP de una fuente de su familia.
Tras debutar en el cine en Gran Bretaña en la década del sesenta, Jane Birkin se instaló en Francia donde formó una pareja de fama artística y popular con el músico, compositor, intérprete y poeta Serge Gainsbourg.
De silueta andrógina y puchero de mujer-niña, encarnación de la bohemia-chic, este icono llevó una gran carrera como actriz y cantante, inspirando también a diseñadores de moda.
Mucho después de la muerte de Serge Gainsbourg en 1991, a pesar de penurias como la desaparición de su hija Kate en 2013 y una leucemia que tardó en sanar, siempre cantó la obra de aquel con el que formó una pareja mítica en los setenta.
Entre los títulos de su repertorio está Je t’aime, moi non plus, éxito mundial en 1969 con olor a escándalo, pues el Vaticano condenó este canto salpicado de gemidos de amor, que fue escrito por primera vez por Gainsbourg para Brigitte Bardot, con quien tuvo un deslumbrante y clandestino romance.
Jane Birkin había anunciado recientemente problemas de salud que la habían obligado a cancelar conciertos.
Jane había nacido en Londres el 14 de diciembre de 1946 en el seno de una familia burguesa y con cierto porte aristocrático. Era hija de una actriz ilustrísima, Judy Campbell (la favorita de Noel Coward) y de un capitán de fragata y héroe de la II Guerra Mundial, David Birkin, que aprovisionaba a la resistencia francesa en los tiempos de la invasión del ejército nazi.
Resultaba imposible que su magnetismo y belleza arrolladora pasaran inadvertidos en los felices ambientes del Swinging London, y de ahí que Michelangelo Antonioni la escogió en 1966 para la película Blow-up (Deseo de una noche de verano), donde protagonizó un primer escándalo por aquel desnudo frontal e inolvidable en todas sus acepciones.
La eclosión de juventud, hermosura y ansias de libertad se prolongaría en 1969 con el psycothriller erótico La piscina, tórrida historia de un triángulo a pleno sol con Alain Delon y Romy Schneider ocupando los dos vértices restantes.
Gainsbourg y Birkin se conocieron durante el rodaje de la película Slogan, de Pierre Grimblat, estrenada en 1969: él interpretaba a un hombre de 40 años -con su esposa embarazada- que se enamoraba de una joven (Birkin) en Venecia.
Tras una cena con el equipo de rodaje, Serge llevó a Jane a su bar de travestis favorito, donde solía cantar blues Joe Turner; luego fueron a un club ruso; después, ya con él muy borracho, al Hotel Hilton, donde la recepcionista le preguntó si quería su habitación de costumbre. Esa noche, admitieron, no hubo sexo. Lo habría poco después, en Venecia: Birkin tenía 22 años; Gainsbourg 40.
Birkin conocía la historia del primer registro de Je t’ aime…, en el estudio B de las salas Barclay, que el músico y poeta había grabado con Brigitte Bardot. El ingeniero de sonido William Flageollet contó que Gainsbourg y Bardot -quien luego intentó que la canción no se difundiera, por miedo a la reacción de su marido, Gunter Sachs- habían tenido una sesión de dos horas en una pequeña cabina de cristal en la que se habían hecho “caricias intensas para lograr mejores sonidos”.
Birkin se sentía en inferioridad artística ante Gainsbourg, que era una estrella del sello Philips y al que ella consideraba un genio. Le preguntó si aquello de los toqueteos con Bardot era cierto. El músico le respondió: “No fue así. Si no, habríamos grabado un disco larga duración entero”. En todo caso, la excitación de Birkin durante la grabación sonó aún más verosímil.
“En algún momento me dejé llevar por la respiración agitada; tanto que, de hecho, me dijeron que me calmara, lo que hizo que por tramos dejara de respirar por completo. Si escucho el disco ahora, todavía siento ese silencio contenido”, confesaría muchos años después. El disco, que venía en un envoltorio con la leyenda “Prohibido para menores de 21 años”, vendió más de tres millones de copias en 1969 sólo en Europa.
Gainsbourg siguió con su vida de excesos, discotecas, borracheras, cigarrillos, drogas, autodestrucción física y romances escandalosos hasta que murió el 2 de marzo de 1991. Ella mantuvo se mantuvo activa hasta que en 2021 sufrió un derrame cerebral que la obligó a cancelar los conciertos que tenía programados. Aparentemente recuperada, intentó regresar a los escenarios a principios de 2023, sin embargo, una fractura del omoplato la obligó a cancelar nuevamente sus presentaciones en vivo. En ese entonces, la artista escribió un mensaje a sus fanáticos prometiendo volver en cuanto se recuperara: “Siempre he sido muy optimista y me doy cuenta de que todavía necesito un poco de tiempo para poder actuar en el escenario nuevamente y con ustedes”.